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Convocan a jóvenes a estudiar programación, un ámbito del conocimiento de rápida inserción laboral

El Gobierno de la Provincia, a través de los ministerios de Economía y Servicios Públicos y de Educación, Ciencia y Tecnología, convocan a jóvenes salteños de entre 18 y 29 años a formar parte de los cursos de programación, empleando los lenguajes PYTHON y JAVA, como respuesta a la demanda puntual del sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs).

La iniciativa se logró mediante un convenio con la Facultad de Ciencias Exactas de la UNSa. Las inscripciones se extenderán hasta el  23 de septiembre y la fecha de inicio está estipulada para el 1 de octubre. La enseñanza es no arancelada y con certificación de la Universidad Nacional de Salta.

Los interesados deberán ingresar en el link: http://cooperacion.unsa.edu.ar/index.php/milprogramadoressaltenos/ y llenar el formulario. También se pueden hacer consultas a la casilla de e-mail milprogramadoressalta@gmail.com

El ministro de Economía y Servicios Públicos, Roberto Dib Ashur, indicó que “el mundo está exigiendo nuevos conocimientos y Argentina necesita 100.000 programadores en los próximos años, por ello desde el Gobierno y la universidad, queremos empezar por los primeros 1.000 programadores salteños, para abrir las puertas al nuevo mundo de la Cuarta Revolución Industrial”.

En esta línea, el ministro de Educación, Ciencia y Tecnología, Matías Cánepa, sostuvo que  “la necesidad de programadores está presente en el mercado local, nacional e internacional. La idea es lanzar esta oferta que es fundamental porque tiene que ver con la Economía del Conocimiento, que es un área con un potencial enorme en cuanto a la inserción de personas en el mundo laboral. Vamos a ayudar a empresas locales a que cuenten con programadores para mejorar sus procesos de producción y además que estas personas puedan especializarse y acceder a  empresas internacionales”.

El proyecto busca la capacitación de jóvenes salteños en programación empleando los lenguajes PYTHON y JAVA como respuesta a la demanda puntual del sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs). Se pretende transmitir no sólo conocimientos técnicos, avalados y diagramados en conjunto con empresas de tecnología, sino también valores personales y habilidades blandas profesionales. 

El foco del programa está puesto en la pronta inserción en el mercado laboral de los perfiles capacitados y en la generación de un ecosistema de innovación y tecnología en Salta, como visión de espacio generador de igualdad de oportunidades y desarrollo.

Panorama general

El sector de Software y Servicios Informáticos (SSI) ha tenido un notable desempeño en la Argentina desde el inicio del nuevo milenio. Las exportaciones de SSI alcanzaron en 2017 más de USD 1700 millones, representando 2,5% del total de exportaciones del país. 

En los últimos 10 años la cantidad de empleados privados declarados en el sector SSI creció un 50%, y la cantidad de empresas aumentó un 36%.

A nivel global, existe una gran demanda de recursos humanos calificados para ser incorporados en empresas relacionadas a los SSI, sin embargo, las empresas no pueden cubrir la totalidad de las vacantes. En el 2020, la demanda de recursos humanos en el ámbito de la informática y de las nuevas tecnologías fue de 900.000 puestos de trabajo en la Unión Europea, suponiendo un 8% del empleo total, sin embargo, no está siendo posible cubrir toda la demanda que precisan las empresas, dado que la ingeniería informática está cobrando una importante relevancia en casi todos los sectores.

Economía del Conocimiento

La Economía del Conocimiento, Economía Basada en Conocimiento (EBC) o industria del conocimiento, es el sector de la economía que utiliza la información como elemento fundamental para generar valor y riqueza por medio de su transformación a conocimiento. Abarca títulos como la educación, investigación y desarrollo, alta tecnología, informática, telecomunicaciones, robótica, nanotecnología e industria aeroespacial.

Desde finales del siglo XX, la inversión en capital intangible ha crecido considerablemente, incluso en mayor medida que el capital tangible (maquinaria, materias primas, etc).